El Ayuntamiento de L'Hospitalet compró el antiguo Cine Joventut para transformarlo en el teatro del municipio y uno de sus principales equipamientos culturales. El mismo edificio, el mismo estilo arquitectónico que había creado Ramon Puig y Gairalt décadas antes, pero como si fuera nuevo.

El 8 de mayo de 1991 el nuevo Teatre Joventut levantó por primera vez el telón. Fue con el estreno de la obra El cántaro roto, a cargo de una compañía de Madrid. Desde entonces se han representado muchas y muy variadas obras de teatro, han sido cientos los actores y las actrices que han pisado su escenario, y miles de espectadores los que han disfrutado.