PLI

22 sillas de conferencias, un ritmo obsesivo y un hombre devoto. En una pequeña plataforma este singular bailarín se sumerge decididamente en el esfuerzo por la construcción indefinida, la reconstrucción y la deconstrucción del universo. El resultado es un solo inteligente y juguetón, una metáfora física de la dinámica humana infinita, la paciencia y el esfuerzo, que convierte, incluso los objetos más comunes, en piezas de arquitectura increíbles. Un montaje en el que la robustez barroca se encuentra con el minimalismo contemporáneo de una manera ingeniosa y humorística.

Con base en Praga, Viktor Černický, crea obras que rozan la línea fina entre la danza, el circo y el teatro físico. Sus obras, basadas en la investigación de la dinámica entre un intérprete y un objeto, sorprendieron al público de toda Europa y le merecieron varios premios. Con PLI ha sido seleccionado en Aerowaves Twenty20.